miércoles, 22 de agosto de 2007

En suspenso

Y volviste a mí
en la canción que me aprendí
para darte y no escuchaste,
la sonrisa tan borrosa y desgastada
atrapando mis recuerdos
en manojos de palabras
de una tarde en tu ciudad
y las ganas de saber
si era acaso tu respuesta
o tan solo coincidencias.

Entonces recordé,
y vino a mí
ese abrazo de salida
con otro análisis al viento
de mis torpes agonías
de saber que te quería
y que tan solo no podías
por haber llegado tarde
a encontrarte de regreso.

Y volviste,
distrayendo mi futuro
en tus ojos y caricias
atrasando mis relojes
y dejándome en el vicio
de los besos nunca dados
el rumor de lo que fue
el amor que nos guardamos

entre líneas desarmadas
continuando con mi vida
y arrastrando los excesos
del olvido y sus manías.

Entonces entendí,
que solo estas entre mis manos
como el aire que dejaste
al dejarnos en suspenso
y las ganas que supuse
más jamás me confesaste
de quedarte para siempre
por si acaso era algo cierto.


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